11 junio 2025

Debemos cultivar una cultura de innovación

La ingeniería y la construcción ya se encuentran en la transformación digital, la cual está redefiniendo la manera en que diseñamos, construimos y gestionamos los proyectos. En el centro de esta revolución se encuentran dos tecnologías claves: el BIM (Building Information Modeling) y la inteligencia artificial. El BIM, conocido también como los Gemelos Digitales, ha […]

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Columna de

Dr. Patricio Tapia Gutiérrez

Decano FACIC

La ingeniería y la construcción ya se encuentran en la transformación digital, la cual está redefiniendo la manera en que diseñamos, construimos y gestionamos los proyectos.

En el centro de esta revolución se encuentran dos tecnologías claves: el BIM (Building Information Modeling) y la inteligencia artificial. El BIM, conocido también como los Gemelos Digitales, ha emergido como el nuevo estándar para el diseño y la gestión de proyectos. No se trata sólo de planos en 3D; BIM nos permite integrar información clave en todas las etapas del ciclo de vida de un proyecto, desde la planificación hasta el mantenimiento. Con BIM podemos optimizar recursos, prever problemas antes de que surjan y garantizar una coordinación fluida entre los distintos actores del proyecto.

Por otro lado, la inteligencia artificial está ampliando aún más nuestras capacidades. Gracias a la inteligencia artificial ahora podemos analizar grandes cantidades de datos en tiempo real, identificar patrones y generar predicciones que mejoran la toma de decisiones. Desde modelos predictivos para anticipar fallos en maquinarias y equipos, hasta sistemas que optimizan los cronogramas y presupuestos, la inteligencia artificial está ayudando a reducir costos y riesgos, mientras aumentamos la calidad y la eficiencia.

Juntos, BIM e inteligencia artificial, no sólo nos permiten construir edificios y estructuras; nos permiten construirlos de manera más sostenible, inteligente y responsable. Este cambio beneficia nuestro quehacer como ingenieros y constructores, y también a las comunidades que servimos, al minimizar impactos ambientales y maximizar la calidad de vida.

Sin embargo, esta transformación no es automática. Requiere compromiso, formación y la disposición para adaptarse. Debemos cultivar una cultura de innovación en nuestros estudiantes y asegurarnos de que ellos estén preparados para aprovechar estas herramientas al máximo. Lamentablemente, las entidades públicas, donde se genera la mayor cantidad de obras para la ciudadanía, no van al ritmo que se quisiera en la adopción de estas tecnologías y nuestros titulados  son los llamados a implementarlas en las empresas e instituciones donde lleguen a desarrollarse profesionalmente.

Estamos ante una oportunidad histórica para transformar nuestra industria. BIM e inteligencia artificial no son simplemente tecnologías; son catalizadores de un futuro en el que la ingeniería y la construcción se convierten en motores de progreso, sostenibilidad e innovación. Invito a nuestros estudiantes y egresados a abrazar este cambio con entusiasmo y a liderar juntos esta nueva era.

Columnista

Dr. Patricio Tapia Gutiérrez

Decano FACIC

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